J.M. Firearms Collection

DEVISME 1858 Colección de Jesús Madriñán

Datos técnicos
Devisme
París (Francia)
1858 - 1867
Simple Acción
104 mm.
Nogal
Estriada.
Devisme fue una de las firmas armeras más importantes y populares de la Francia del siglo XIX. Fabricó una gran variedad de armas, tanto blancas, como espadas y sables, como de fuego, rifles, escopetas, armas de duelo, avisperos y revólveres, todas se caracterizaban por su calidad, diseño y exquisita decoración.

F. P. Devisme se introdujo en el mundo de las armas en 1819 como aprendiz del arcabucero parisino Deboubert. En 1834, abrió su primer taller en la Rue du Helder y en 1850, debido a la demanda de sus armas, se vio en la necesidad de ampliar sus instalaciones por lo que se mudó al número 36 del Boulevard de los Italianos. Contaba por entonces con tres sucursales en Rusia además de cuatro campos de tiro situados en los alrededores de París. La firma permaneció en dicho local hasta 1867 en que, por motivos económicos, se vio obligada a cerrar. Hubo intentos de reabrirla pero el fallecimiento de su hijo Jean-Louis Françoisen Devisme (1806-1873), hizo que aquel cierre se convirtiera en permanente al no haber un sucesor que se hiciera cargo de ella. Entre ambos habían desarrollado e inscrito multitud de patentes.

La gran mayoría de sus armas estaban destinadas a un mercado civil adinerado, tanto francés como extranjero, ya que más del 50% de su producción se dedicaba a la exportación, incluyéndose en su lista de clientes a presidentes de gobierno así como a miembros de la aristocracia y de las familias reales europeas.

Una escopeta de cañones paralelos, excepcionalmente ornamentada, fabricada por Devisme fue regalada en 1844 al príncipe Alberto, esposo de la Reina Victoria de Inglaterra, por el rey francés Louis-Philippe como muestra del virtuosismo de los talleres parisinos. Además, ese mismo año, el rey de Francia también le regaló una miniatura similar para el Príncipe de Gales, que por entonces contaba con sólo tres años de edad. El príncipe Alberto declaró que por fin había encontrado un arma con la que su hijo, el heredero a la corona británica, pusiera entrenar con facilidad, precisión y seguridad.

Después de este acontecimiento, en 1851, durante la Exposición Universal de Londres celebrada en el Crystal Palace, la reina Victoria le compró un par de pequeñas pistolas por 8 libras y otro par para damas por otros 24. Fue galardonado con la apreciada medalla de la Gran Exposición.

A lo largo de su andadura, los Devisme, tanto padre como hijo, fueron merecedores de varias medallas en exposiciones nacionales e internacionales como premio por la calidad de sus armas, siendo, en 1867, Jean-Louis Françoisen Devisme nombrado Caballero de la Legión de Honor.

En 1854, diseñó un revólver de percusión conocido como Modelo 1855 que, en 1858, transformó a fuego central bajo una nueva patente pasando a conocerse como Modelo 1858. Fue uno de los primeros fabricantes en utilizar cartuchos de fuego central. También, a partir de 1858, comenzó a manufacturar sus propios cartuchos de 7, 9 y 11 mm que eran los calibres de sus revólveres.

Ambos son de simple acción y se caracterizan porque gracias a una bisagra, el conjunto compuesto por cañón y tambor, puede bascular 90º hacia abajo para facilitar su carga. Para hacerlo, había que girar a derechas la varilla de extracción que iba unida al cañón mediante un engranaje de varios dientes hasta que este quedaba libre. El escaso espesor de las paredes del tambor permite deducir el escaso poder de la munición. En la solera del cañón va marcado: "Devisme à Paris", y en la parte delantera izquierda del armazón, justo delante del tambor, figura DEVISME Bte. Además no es raro que Jean-Louis Françoisen Devisme punzonara sus armas con las siglas FD bajo una corona. Se fabricaron en calibres con una ejecución primorosa, acorde con el cliente al que iba destinado, y una silueta muy particular fácilmente reconocible.

El Devisme Modelo 1858 de fuego central se creó para competir con los revólveres Lefaucheux reglamentarios entonces en el ejército francés, ya que el marcado militar era un bombón demasiado sabroso como para poder obviarlo, pero no tuvo éxito en las pruebas a que fue sometido debido a que los Lefaucheux resultaban mucho más resistentes y económicos. Aun así, muchos oficiales se decantaron por ellos siendo protagonistas en la guerra franco prusiana de 1870.

En 1861, en los EE.UU. estalló la Guerra de Secesión entre los Estados confederados del Sur y la Unión del Norte. El Norte industrial, cuatro veces más poblado, disponí¬a de una superioridad material aplastante. El Sur, aristocrático y rural, carecí¬a de infraestructura industrial y fue estrangulado por el bloqueo de sus costas para evitar que pudieran abastecerse con material bélico.

En esta guerra desempeñó un gran papel el revólver. Se calcula en unos 750.000 la cantidad de ellos adquiridos por el ejército nordista, mientras que el Sur tuvo grandes dificultades para obtenerlos. Compró revólveres Colt y Starr de contrabando y Lefaucheux, Kerr, Devisme y Le Mat, en Europa. En conjunto, el Sur adquirió fuera de sus fronteras 250.000 unidades, produciendo solamente unos 20.000 en su territorio. El propio presidente de los recién creados Estados Confederados de América, Jefferson Davis, tenía un rifle fabricado por Devisme, y a su vez, el sable del General Robert E. Lee era también de la misma firma. En 1865, el general Lee se lo entregó al general Grant como muestra de rendición pero, caballerosamente, este no lo aceptó y hoy se conserva en el Museo de la Confederación.

Los revólveres de fuego central comprados por la Confederación fueron fabricados entre los años 1858 y 1861. El hecho de que fueran de fuego central pudiera no parecer transcendente hoy en día, pero la posesión entonces de un revólver de retrocarga con cartuchos de fuego central del calibre .44 era desconocida en los EE.UU. Solo Smith & Wesson gracias a su patente Rollin White, fabricó revólveres de retrocarga a partir de 1860, pero sus cartuchos eran de fuego anular y su calibre máximo era el .32 que era el que usaba su Modelo Nº 2, el cual disfrutaba de una demanda tal que, una vez encargado, había que esperar dos años antes de que se le entregara al cliente. En dicha confrontación, el revólver Devisme era una apreciada arma considerada como una verdadera obra de arte.

Jesús Madriñán