MAUSER Schnellfeuer Modelo 712 Colección de Jesús Madriñán

La Schnellfeuer Pistole, también conocida como Modelo 712, fue una modificación que incluía selector de tiro a ráfagas realizada por la Mauser en su ya famoso modelo C.96, el cual fue usado por el Ejercito Alemán durante la I Guerra Mundial, convirtiéndose en una de las pistolas semiautomáticas más famosas del mundo.

Al rematar dicha guerra, los armeros españoles que habían estado proveyendo de armas a algunos países beligerantes, vieron como sus pedidos se congelaban, por lo que decidieron salir en busca de otros mercados que surtir. De este modo descubrieron el gran filón que era en aquel momento China, y la gran aceptación que allí había por la Mauser C.96, por lo que firmas como Beistegui Hermanos y ASTRA decidieron copiarla, con más o menos fidelidad, para competir en aquel mercado con la firma alemana.

Y es que, a mediados de la década de 1920, China estaba inmersa en una situación turbulenta como pocas. Padecía una interminable guerra civil que movía ingentes cantidades de hombres que precisaban de un armamento abundante, todo ello dentro de un ambiente muy poco definido donde, a los bandos oficiales enfrentados, había que añadir importantes partidas de bandoleros y paramilitares de carácter feudal capitaneados por auténticos señores de la guerra que hacían de aquella contienda un inmenso río revuelto en el que encontraban una excelente pesca.

Sin embargo, China estaba lejos; los canales comerciales con el extenso país no estaban firmemente establecidos y la única ruta segura pasaba por Japón que consideraba naturales ciertos derechos sobre grandes áreas de China. Consecuencia de ello fue el embargo decretado por los japoneses sobre cualquier equipo bélico destinado allí. El embargo no afectaba a las armas cortas, consideradas sólo aptas para la defensa individual, y esa cláusula permitió a la firma Mauser abrir el resquicio por el que introducir su pistola que contaba con la posibilidad de adaptarle una funda culatín, lo que unido a la mira graduada de 50 a 1.000 metros, la convertía en una pequeña carabina que resultaba un sucedáneo bastante aceptable a los fusiles cuyo tránsito negaba Japón.

Este resquicio también fue aprovechado por las firmas españolas que durante años introdujeron sus copias de la C.96 por él. Pero en 1927, la firma Beistegui Hermanos se puso al frente de aquel mercado gracias a que dotó al segundo modelo de su pistola Royal de un selector de tiro que permitía el disparo en ráfagas aparte del tiro semiautomático normal. La aceptación de que fue objeto esta pistola supuso una competencia de tal magnitud para la C.96 de Mauser (y para las ASTRA), que esta, alarmada, se vio en la obligación de copiar dicho selector, para lo cual, la firma de Oberndolf se hizo con algunas unidades de la Royal.

Así, en 1930 el diseñador de Mauser, Joseph Nickl introdujo en la C.96 una serie de modificaciones que eran prácticamente copias de la Royal española, patentándolas el 25 de noviembre de 1930. Estas consistían en reforzar el armazón, añadir el selector de tiro y la utilización de cargadores independientes de 10 y 20 cartuchos, lo que dio como resultado la Schnellfeuer Pistole, de la cual, entre 1930 y 1931 se produjeron 4.000 unidades que fueron enviadas a China.

Debido a algunos problemas que se presentaron en este primer diseño, el armero Karl Westinger introdujo en 1932 una versión mejorada que continuó denominándose Schnellfeuer Pistole. Su producción se realizó entre 1932 y 1938, con un total de 98.000 unidades, la mayoría de las cuales fueron enviadas a China antes de 1937, cuando el nuevo aliado de Alemania, Japón, invadió ese país, cerrando el importante puerto de Shangai y desmantelando todos los canales de suministro.

La Mauser Schnellfeuer destinadas a la exportación a China se marcaban en fábrica con 3 punzones en caracteres chinos cuya traducción es “Fabricada en Alemania”. El arma de esta colección los lleva en la parte superior de la boca del cargador, por lo que todo hace suponer que proviene de allí.

Sobre 1935, algunas de ellas fueron adquiridas por unidades paramilitares de la policía alemana, y usadas en la represión de las innumerables manifestaciones de esa época. Una de los incidentes más notorios en donde se hizo uso de una Schnellfeuer-Pistole ocurrió en Francia en 1934, cuando el Rey Yugoslavo Alexander II fue asesinado en las calles de Marsella.

No fue sino hasta 1939 cuando la Wehrmacht inició su adquisición, siendo denominada por los militares Reihenfuuer (serie de fuego) Modelo R713. Fue usada por las Waffen SS, por las unidades de defensa antiaérea de la Luftwaffe (7.800 ejemplares situados entre los números 83.000 y 93.000 y que llevan el punzón del águila con la esvástica), y por la infantería de la Kriegsmarine.

Tenía una increíble cadencia de tiro de 900 balas por minuto (15 por segundo), por lo que las 20 de su cargador, en selección de tiro automático, tardaban en agotarse poco más de un segundo. Si a esto le unimos el poco peso del arma, dispararla a modo de ráfaga con cierta precisión era una tarea prácticamente imposible.

Jesús Madriñán