J.M. Firearms Collection

AVISPERO JACOB RUPERTUS Colección de Jesús Madriñán

Datos técnicos
JACOB RUPERTUS
Filadelfia (USA)
1864
Simple Acción
75 mm.
Lisa
El llamado avispero es un arma formada por un conjunto de cañones, de número variable, dispuestos concéntricamente sobre un eje.

El pequeño avispero de esta colección fue fabricado por Jacob Rupertus, que tenía su taller en Filadelfia y que está considerado como uno de los más afamados armeros norteamericanos de mediados del siglo XIX. Todas sus armas eran de una exquisita calidad y sus remesas siempre muy cortas, características que, sin duda, influyen en los elevados precios que, hoy en día, alcanzan sus obras.

Una idea de lo limitado de su producción es que sólo fueron 3.000 las unidades fabricadas de este avispero, siendo esta arma la que en mayor número produjo.

La vida activa de esta firma la podemos ubicar entre 1860 y 1880 y, aunque llegó a producir unos pocos modelos de revólveres para el Ejército (ninguno pasó de la docena de unidades), sus elevadísimos precios no le permitieron competir con los afamados Colt, Remington, Starr y otros revólveres presentes por aquel entonces.

La pieza de esta colección fue patentada el 19 de julio de 1864. En su lado derecho figura la siguiente inscripción: RUPERTUS PAT. PISTOL MFG CO. PHILADELPHIA, y en el izquierdo: RUPERTUS PATENT JULY 19, 1864.

De simple acción y fuego anular, el cilindro está acanalado entre cañones con el fin de aligerar su peso. El armazón es de bronce, los cañones de acero pavonado con un bonito negro azulado y las cachas de nogal negro. Cuenta con ocho cañones del calibre 22. Casi todas las piezas de sus armas van numeradas con los dos últimos dígitos del número de serie, viéndose sólo esta misma minuciosidad en las fabricadas por la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial.

La verdadera innovación de este avispero radica en una gruesa argolla situada entre el bloque de cañones y el armazón. En ella está ubicada una muesca por donde penetra el perrillo para disparar y la ventana de alimentación. Girando la argolla a izquierdas se accionaba un seguro al quedar la mueca fuera del camino del perrillo, evitándose así cualquier disparo accidental.

Al realizar esta acción también quedaba la ventana de alimentación a la vista (con la muesca en posición de disparo esta queda escondida debajo, entre el bloque de cañones y el armazón), pudiéndose cargar sacando previamente los casquillos disparados con ayuda de una baqueta que lleva en el interior del bloque de cañones y que se extrae por la parte delantera. En las fotos adicionales se ve perfectamente lo explicado todo lo escrito.

El avispero nació por la necesidad de aumentar el poder de fuego, ya que hasta entonces las armas eran generalmente monotiro. La fabricación de estos tuvo su cenit entre 1830 y 1860, alcanzando gran difusión en Inglaterra, Bélgica y Estados Unidos donde se puso de moda durante la Fiebre del Oro de California, debido a que en 1830 todavía no se conocía el revólver y con demasiada frecuencia la vida de un hombre dependían del poder de fuego con que contara.

Está considerado como un arma de transición entre la pistola y el revólver, resultando eficaz sólo en distancias cortas. La producción española de avisperos es mucho más reducida que la de otros países. Los primeros que se conocen son de la firma Orbea Hermanos de Eibar que, en 1864, obtuvieron el privilegio de fabricación del modelo francés de Jean Mathieu Deprez, pero para entonces el revólver era ya un arma de sobra conocida por lo que apenas cuajó en nuestro mercado.