J.M. Firearms Collection

PISTOLA SHARPS ESPAÑOLA Colección de Jesús Madriñán

Datos técnicos
Antonio Lizundia
Eibar
1885 (aproximadamente)
Percusión anular
74 mm
Asta
Estriada
Christian Sharps (1811-1874), nació en Filadelfia y fue un notable diseñador cuyas armas fueron profusamente utilizadas durante la Guerra Civil americana, destacando el célebre rifle que lleva su nombre y que lo consagró en la historia de los mejores armeros del mundo. Salió al mercado en 1848 y pronto se ganó las simpatí­as de los militares, hasta el punto de que fue el más usado de toda la contienda.

En 1849, inventó una pequeña pistola de percusión anular de 4 cañones en bloque preparados para usar proyectiles de ignición periférica del calibre 22 y 32. El percutor consiste en un pequeño disco que lleva adosada una pestaña que hace de aguja percutora, y que gira cada vez que se monta el arma con el fin de disparar alternativamente cada cañón. Es como una simplificación del avispero, en vez de girar todos los cañones cada vez que se aprieta el gatillo, gira sólo el percutor. Continuó con su fabricación hasta 1874.

En Europa, Sharps sólo le concedió el privilegio de la fabricación de esta pistola a la firma británica Tipping & Lawden de Birmingham, aun así­, fue plagiada por muchos de los talleres armeros del continente, incluyendo los españoles que la fabricaron en todos los calibres, acabados y tamaños imaginables.

La pistola original diseñada por Sharps tení­a el sistema de cierre de corredera, mientras que las fabricadas en Europa contaban con sistema basculante y mecanismo de apertura situado en el costado izquierdo, análogo al empleado por las pistolas Lefaucheux de cañones paralelos.

El extractor tiene forma de estrella de cuatro puntas que se acciona a través de una varilla central cuyo extremo sobresale por la parte delantera del bloque de cañones.

En los ejemplares para cartuchos de calibre pequeño, las empuñaduras adoptaron la lí­nea norteamericana de remate plano, pero en la producción para calibres superiores se optó por la empuñadura europea de remate esférico y anilla para el fiador.

La pistola de esta colección está firmada por Antonio Lizundí­a, armero que contó con taller propio en Eibar desde 1881 a 1889. Su producción destacó precisamente por la calidad y acabado de este tipo de pistolas.

Disfrutó de gran aceptación popular debido a que resultaba mucho más económica que un revólver. La fabricación en España de estas pistolas remató durante la década de 1880.