J.M. Firearms Collection

REVÓLVER BIBLIA Colección de Jesús Madriñán

Datos técnicos
Anónimo
Lieja (Bélgca)
1865 Aprox.
Leafaucheux.
53 mm.
Marfil
Estriada
Diminuto revólver del sistema Lefaucheux escondido dentro de un Antiguo Testamento. También lleva anclado a la empuñadura una cadeneta de reloj por si se querí­a portar en el chaleco como tal.

Durante la segunda mitad del siglo XIX no era raro encontrarse con estas artimañas destinadas a pasar desapercibidas.

El revólver, cromado y totalmente burilado, lleva los punzones de Lieja y no está firmado. En el cañón se puede leer: "Acier Fondu" (acero fundido). El libro, forrado en piel y vaciado en forma de estuche está fechado en 1753, bajo el tí­tulo: "Abbrégé de la Morale de L´Ancient Testament".

¡Una cucada!
Datos técnicos
Anónimo
Lieja (Bélgca)
1865 Aprox.
Leafaucheux.
53 mm.
Marfil
Estriada
Casimir Lefaucheux (Bonnétable 1802, Parí­s 1852), fue un afamado armero parisino que tení­a ubicado su taller en el Nº 5 de la calle J. T. Rousseau. En 1836 inventó la primera escopeta basculante de retrocarga antecesora de muchas de las actuales. Fue también el primero que ideó un cartucho en el que fulminante, vaina y bala estaban unidos. Al principio la vaina estaba realizada en papel o cartón y envolví­a todo el conjunto a semejanza de los cartuchos de caza actuales, pero en 1846, los armeros Gévelot y Houiller diseñaron la vaina metálica y, gracias ello, ese mismo año Casimir Lefaucheux patentó un arma completamente revolucionaria para la época. Se trataba de una escopeta y fue la primera arma de retrocarga que contó con cartucho metálico.

Con este invento entrarí­a en la Historia de las armas, pues fue el primer sistema generalizado que permití­a cargar las armas por detrás, abandonando así­ el engorroso sistema de avancarga.

Lo presentó en sociedad en la Gran Exposición de Londres de 1851, pero ese año la gran atracción estaba reservada para los revólveres Adams y, sobretodo, Colt que, aprovechando la inauguración de su nueva factorí­a en Londres, querí­a introducir a toda costa sus productos en el mercado europeo.

Casimir Lefaucheux murió al año siguiente y su hijo, Eugene Gabriel Lefaucheux continuó con el buen hacer de su padre, patentando en 1854 un revólver con este mismo sistema que, con el tiempo y algunas variaciones serí­a adoptado, entre otros, por el ejército francés, español, suizo, belga, holandés, italiano y noruego.

En España fueron dos las armas reglamentarias que contaron con este sistema: los revólveres Modelos 1858 y 1863.

Los cartuchos de fuego anular y posteriormente los de fuego central acabaron con las armas de sistema Lefaucheux, aunque a principios del siglo XX no era raro ver alguna escopeta de caza de este sistema por las tierras de España.